NO SABES CUANTO TE QUIERO
Esta amaneciendo, que paz refleja tu cara cuando duermes,
ya es casi la hora de empezar un nuevo día y la verdad,
reconozco que no me gusta nada madrugar,
quizás sea esa la razón, por la que tengo tan mal despertar.
Te agradezco tanto que cada mañana me regales tu primera mirada,
tu sonrisa y me digas “buenos días mi amor”
me encanta mirarte cuando me preparas el café,
te preocupas tanto de lo mío, que se te olvida y no te importa,
que el tuyo se esté quedando frío,
siempre piensas antes en mí que en ti, siempre,
y no sabes cuanto te quiero.
Necesito ese beso, ese beso tuyo de ayer, de hoy y de siempre,
ese beso que me das cuando me marcho y cuando regreso,
cuando llego a casa tarde, cansado y con problemas,
y tu me recibes con los brazos abiertos, me ayudas, me oyes,
y sobre todo me escuchas, y eso alivia mis penas.
Hoy desperté abrazado a ti, me gusto tanto mirarte,
tenías los ojos cerrados de la luz y la mente abierta a los sueños,
tu cuerpo, completamente desnudo,
mis manos parecían tener alas, se me escapaban,
volaban hacia ti, te deseaban, y te acaricié de los pies a la cabeza, una y otra vez,
no sabes cuanto te quiero,
hay veces que no nos hacen falta ni las palabras para entendernos,
nos basta con mirarnos, y si por alguna tontería discutimos,
acabamos encontrándonos, donde mas cerca nos sentimos,
mas unidos, nuestra cama.
Si nos va bien o mal, yo a tu lado y tu al mío, juntos,
fundidos como arena y cal, como agua del mismo río,
hay quien no entiende este amor, hay quien nos da la espalda,
que mas nos da, si tu y yo sabemos que cuando nos conocimos,
decidimos echar el ancla.
Te he sentido tantas veces cuando a media noche te levantas,
me miras y me mimas como si aún fuera un crío,
pareces adivinar que estoy sintiendo frío y me echas otra manta,
me gusta como me tratas y me gusta como me amas,
eres el mejor regalo que me ha dado la vida, no sabes cuanto te quiero,
compartes todas mis cosas, todo lo que se puede sentir cuando de verdad se ama,
en esos momento de entrega tuya y mía, donde solo hay un testigo que nos mira,
calla y guarda nuestra intimidad, nuestra cama.
No comments:
Post a Comment